No [pensé en dimitir] porque gozo de un gran apoyo en ICV y por la óptima nota que se dio a la campaña y a la la legislatura, dentro y fuera. Pero sí, me llegó la frustración. Después de tanto trabajo...
Joan Herrera, diputado de ICV, en una entrevista aparecida hoy lunes en el diario Público. Entre otras cosas, el político catalán anuncia su divorcio político de Llamazares, a quien culpa de su fracaso electoral, y le gustaría "tener un referente de ICV homologable en España" y llevar su modelo rojiverde a la población urbana de otras partes del país. También lamenta que el miedo del miedo al PP agitado por los socialistas les hayan perjudicado a ellos. La verdad es que no veo motivo para el lamento, pues no fueron precisamente los de ICV quienes se desmarcaron de esa postura, sino que se unieron al carro tan contentos.
El miércoles pasado, Gabriel Colomé, experto electoral del PSC, afirmaba en una mesa redonda organizada por la Fundación Pablo Iglesias que el éxito de su partido residió en diseñar una campaña anti-PP dirigida a los votantes de varios partidos, ya que todos ellos habían sido igual de agresivos a la hora de criticar a los peperos, y por tanto podrían votar a los socialistas.
ICV perdió en las últimas elecciones el 20% de su apoyo electoral. Joan Herrera no tiene nada que ver con eso. Él no se responsabiliza de ningún voto perdido.
La verdad es que no salgo de mi asombro. No hay un sólo político cuya conducta tras el nueve de marzo me parezca digna de un mínimo elogio. Ni siquiera Esperanza Aguirre, cuya resistencia a anunciar si va a presentarse contra Rajoy por "respeto a los votantes" me parece una broma de dudoso gusto.
Y en cuanto a los medios, estoy de acuerdo con las opiniones de algunos, pero no tanto con sus motivos, y comprendo los motivos de otros, aunque no comparto en absoluto sus opiniones. Respecto a aquellos con los que nunca he coincidido, mi opinión sobre ellos no ha mejorado. He decidido comprar prensa de izquierdas porque creo que está cubriendo la crisis del PP con bastante menos pasión que la de derechas, que últimamente me pone muy nervioso. Como mucho, la lectura de periódicos como Público me hace reír. Hoy llevaban un reportaje sobre las reacciones de "la derecha mediática radical" a la crisis del PP. Entre otros, incluían al bueno de Eduardo Mendicutti, cuyo reciente ingreso en Alternativa Española me parece una gran exclusiva de la que ni él se habrá enterado.
Corrección: Aguirre dijo "militantes", no "votantes".
Joan Herrera, diputado de ICV, en una entrevista aparecida hoy lunes en el diario Público. Entre otras cosas, el político catalán anuncia su divorcio político de Llamazares, a quien culpa de su fracaso electoral, y le gustaría "tener un referente de ICV homologable en España" y llevar su modelo rojiverde a la población urbana de otras partes del país. También lamenta que el miedo del miedo al PP agitado por los socialistas les hayan perjudicado a ellos. La verdad es que no veo motivo para el lamento, pues no fueron precisamente los de ICV quienes se desmarcaron de esa postura, sino que se unieron al carro tan contentos.
El miércoles pasado, Gabriel Colomé, experto electoral del PSC, afirmaba en una mesa redonda organizada por la Fundación Pablo Iglesias que el éxito de su partido residió en diseñar una campaña anti-PP dirigida a los votantes de varios partidos, ya que todos ellos habían sido igual de agresivos a la hora de criticar a los peperos, y por tanto podrían votar a los socialistas.
ICV perdió en las últimas elecciones el 20% de su apoyo electoral. Joan Herrera no tiene nada que ver con eso. Él no se responsabiliza de ningún voto perdido.
La verdad es que no salgo de mi asombro. No hay un sólo político cuya conducta tras el nueve de marzo me parezca digna de un mínimo elogio. Ni siquiera Esperanza Aguirre, cuya resistencia a anunciar si va a presentarse contra Rajoy por "respeto a los votantes" me parece una broma de dudoso gusto.
Y en cuanto a los medios, estoy de acuerdo con las opiniones de algunos, pero no tanto con sus motivos, y comprendo los motivos de otros, aunque no comparto en absoluto sus opiniones. Respecto a aquellos con los que nunca he coincidido, mi opinión sobre ellos no ha mejorado. He decidido comprar prensa de izquierdas porque creo que está cubriendo la crisis del PP con bastante menos pasión que la de derechas, que últimamente me pone muy nervioso. Como mucho, la lectura de periódicos como Público me hace reír. Hoy llevaban un reportaje sobre las reacciones de "la derecha mediática radical" a la crisis del PP. Entre otros, incluían al bueno de Eduardo Mendicutti, cuyo reciente ingreso en Alternativa Española me parece una gran exclusiva de la que ni él se habrá enterado.
Corrección: Aguirre dijo "militantes", no "votantes".
7 comments:
Los verdes de IC-V son una moda pasajera que ya ha rebotado contra su techo electoral y, por suerte, van camino a la desaparición, en gran parte por haberse sumado a la campaña del PSC que, como se vió, bien hace de Saturno comiéndose a sus hijos.
Joan Herrera es un tio que no tiene mas estatura política que la de presidente de un agrupación de instituto para organizar barbacoas, y todos los de IC-V, comunistas reconvertidos, son de lo mas cutre que ha parido politicamente Catalunya.
El único que se salva (conozco a muchos personalmente; de hecho conozco tambien a Joan Herrera) es un eurodiputado que se llama Raúl Romeva, con quien no coincido ideologicamente pero reconozco que tiene "la casa bien amueblada". El resto (Saura, Majol y toda la colla de progres de casal okupa) son gente que no tiene mucho mas que decir que "no a las nucleares", "papeles para todos" y "no pasarán", y es por eso que no dejan de ser un partiducho periférico.
Ah! Y yo tambien tiendo a leer "prensa de izquierdas" por lo mismo que tu: estan todos metidos en la interna del PP y la desinformación ya es insoportable.
De todas maneras reconozco que despues de leer El País tengo que tomarme una aspirina porque me hace doler la cabeza. El "Púbico" me trae, en cambio, problemas digestivos.
Una pregunta, ¿dice textualmente "llevar su modelo rojiverde a la población urbana de otras partes del país"?
Gracias.
Qu'e tragaderas retro y t'u, leyendo "P'ublico"... Yo no he podido y eso que no lo tengo que pagar porque lo intento -no consigo- leer por internet.
A Aguirre le ha pasado lo que a Gallardón en enero: que ha descubierto sus cartas antes de tiempo. Eso en política es imperdonable. No es malo ser ambicioso, pero sí lo es que se te vea el plumero antes de tiempo. En un tipo como Gallardón esto era lógico pero en alguien tan curtido como Aguirre da un poco de pena. Y de risa.
Sin blanca: aquí le cito a Vd. y hablo de mi bañador:
http://hotelkafka.com/blogs/david_torres/2008/04/no-estoy-gordo-estoy-cerca.html
Literalmente:
El contexto del 9-M era el peor posible. Crecimiento general, más derechos y libertades y una crítica a la política económica continuista que no pudimos colar en la agenda. Pero sí cabemos, más en una España urbana. Sin una izquierda distinta, renovada, parte de la sociedad está huérfana. Creo que algunos socialistas, con mirada miope y cortoplacista, quieren comérselo todo a su izquierda. Yerran: siempre habrá votantes que no se alineen con ellos. Los retos de futuro pasan por nosotros. La cuestión es si cabe una izquierda rojiverde o más. Tal vez no hicimos bien los deberes. Lo intentamos. No deseamos meternos en otras parcelas, pero sí nos gustaría tener un referente de ICV homologable en España.
http://www.publico.es/067339
Gracias
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